ESTUDIOS GASTROENTEROLÓGICOS
Tránsito Esofágico + Reflujo Gastroesofágico
La combinación del estudio de Tránsito Esofágico y Reflujo Gastroesofágico ayuda a evaluar el funcionamiento del esófago y la presencia de reflujo ácido del estómago al esófago. Se usa para detectar problemas de motilidad (movimiento) en el esófago, como dificultad para tragar o esófago dilatado, y para cuantificar el reflujo gastroesofágico, que puede causar síntomas como acidez. Además, ayuda a evaluar el tratamiento de enfermedades esofágicas, como el reflujo y la esofagitis, proporcionando información más precisa y con menos radiación que otros métodos como radiografías o endoscopías.
Hemorragia Digestiva
La Hemorragia Digestiva es un estudio que se utiliza para identificar sangrados en el tracto digestivo, especialmente en casos de sangrado intermitente o difícil de localizar. Involucra inyectar una sustancia radiactiva que permite seguir el flujo sanguíneo y localizar el sitio del sangrado. Es un método muy preciso, capaz de detectar incluso pequeñas cantidades de sangre, y puede monitorear el sangrado hasta por 24 horas, siendo más efectivo que las radiografías tradicionales.
Divertículo de Meckel
El Divertículo de Meckel es un estudio que detecta áreas de tejido estomacal fuera de lugar en el intestino, que pueden causar sangrado digestivo. Se inyecta una sustancia que resalta estas áreas en las imágenes, ayudando a encontrar la causa de problemas como sangrado, dolor abdominal y obstrucción intestinal, especialmente en niños y jóvenes. Es una prueba bastante precisa, útil cuando otras no han encontrado el problema.
Vaciamiento Gástrico de Líquidos y Sólidos
El Vaciamiento Gástrico de Líquidos y Sólidos es un estudio que mide qué tan rápido tu estómago vacía alimentos y líquidos. Ingerirás comida o bebida con una pequeña cantidad de radiotrazador, que se verá en imágenes y permitirá ver cómo se mueve a través del estómago. Esto ayuda a diagnosticar problemas como digestión lenta, bloqueos, gastroparesia (vaciamiento lento del estómago), y evaluar síntomas como náuseas, vómitos, y pérdida de peso.
Gammagrafía de Vías Biliares
La Gammagrafía de Vías Biliares es una prueba que evalúa cómo funciona el sistema que transporta la bilis desde el hígado hasta el intestino. Se utiliza para detectar problemas como obstrucciones, dolor abdominal y evaluar el funcionamiento después de una cirugía de vesícula. En el procedimiento, se inyecta un material radioactivo suave que se mueve a través del hígado, la vesícula biliar y los conductos biliares, permitiendo a los médicos ver si la bilis fluye correctamente o si hay bloqueos. Es útil para identificar condiciones como atresia biliar en recién nacidos y problemas con la vesícula y los conductos biliares.
Gammagrafía de Glándulas Salivales
La Gammagrafía de Glándulas Salivales es un examen que permite evaluar cómo están funcionando las glándulas salivales mayores, como las parótidas y submaxilares, que son las que producen la saliva. Se usa para investigar problemas como la boca seca, inflamaciones, bloqueos, o efectos de tratamientos como la radioterapia. Durante el examen, se inyecta un material radioactivo suave que las glándulas absorben y luego liberan en la saliva, permitiendo a los médicos ver su actividad y detectar cualquier problema. Es un procedimiento seguro y no invasivo que ayuda a entender mejor las causas de los problemas con la producción de saliva.
Gammagrafía Hepática
La Gammagrafía Hepática es un procedimiento que utiliza una pequeña cantidad de material radioactivo para evaluar la forma y función del hígado. Se realiza para detectar diferentes tipos de problemas, como tumores, quistes o abscesos en el hígado, así como para evaluar enfermedades hepáticas difusas. Esta prueba complementa otras técnicas de diagnóstico, como ecografías o resonancias magnéticas, permitiendo una detección más precisa incluso de lesiones pequeñas.
Gammagrafía Esplénica
La Gammagrafía Esplénica es un procedimiento en el que se administra una pequeña cantidad de una sustancia radiactiva que se adhiere a los glóbulos rojos en la sangre. Esta sustancia radiactiva permite que se tomen imágenes del bazo con una cámara especial. Con estas imágenes, los médicos pueden evaluar el tamaño, la forma y la función del bazo, así como detectar cualquier anomalía o problema, como agrandamiento del bazo, lesiones o trastornos sanguíneos. Es una prueba no invasiva y segura que proporciona información importante sobre la salud del bazo.