ESTUDIOS ONCOLÓGICOS

Te explicamos brevemente de qué tratan los estudios oncológicos que realizamos

Rastreo en Melanoma

El rastreo en melanoma es una prueba que busca la presencia de células cancerosas en otras partes del cuerpo para detectar si el melanoma se ha extendido. Este estudio es especialmente útil para pacientes con melanoma de riesgo medio a alto, ya que puede identificar metástasis en los ganglios linfáticos que no se pueden sentir con el tacto. Ayuda a los médicos a decidir el mejor tratamiento, especialmente en pacientes que no pueden someterse a una cirugía extensa de los ganglios linfáticos.

Rastreo de Cuerpo Entero 131I

Este estudio busca detectar si el cáncer de tiroides se ha extendido a otras partes del cuerpo, como los ganglios linfáticos. Se realiza después de una cirugía para extirpar la tiroides o después de una dosis terapéutica de yodo radioactivo. Este tratamiento ayuda a destruir las células cancerosas en áreas donde el cáncer se ha propagado, mejorando así las posibilidades de supervivencia, especialmente en casos de cáncer tiroideo papilar o folicular.

Dosis de 131I para Cáncer Tiroideo

Este tratamiento implica tomar una medicina especial que contiene una sustancia llamada yodo radioactivo. Esta medicina ayuda a eliminar cualquier tejido tiroideo anormal que pueda quedar después de la cirugía para tratar el cáncer de tiroides. Es importante recibir este tratamiento en el hospital y permanecer allí hasta que la radiación registrada por el cuerpo disminuya considerablemente. Durante este tiempo, es posible que las visitas de amigos y familiares sean limitadas para protegerlos de la radiación. La cantidad de medicina que recibas dependerá del tamaño y la actividad del tumor. Es esencial tener en cuenta que este tratamiento no se realiza en mujeres embarazadas o lactantes debido a posibles riesgos para el bebé.

Tratamiento Paliativo del Dolor 153 Sm

Este tratamiento está dirigido a personas que experimentan un dolor intenso debido a la propagación del cáncer a los huesos. Implica la administración de una sustancia radioactiva llamada samario-153, que se concentra en los huesos. Esta terapia se administra por vía intravenosa y se considera una excelente opción para aliviar el dolor óseo que no responde a otros tratamientos. Es especialmente útil cuando otras opciones no han tenido éxito en controlar el dolor.